3. Mejor es el dolor que la risa, porque la tristeza ejerce una influencia purificadora.
4. El sabio piensa mucho en la muerte, mientras que el necio sólo piensa en divertirse hoy.
5. Mejor es la censura del sabio que la alabanza del necio.
6. Porque la adulación del necio se desvanece tan pronto como el papel en el fuego, y es tonto dejar que nos impresione.
7. El soborno entorpece al sabio; le destruye el entendimiento.
8. Mejor es terminar que comenzar. La paciencia es mejor que el orgullo.
9. No te dejes llevar por la ira, porque eso es necedad.
21-22. No escuches a hurtadillas. Podrías oír a tu siervo murmurando de ti. Bien sabes cuán a menudo hablas tú mal del prójimo.
23. He hecho lo posible por ser sabio. Dije: «Yo quiero ser sabio», pero fue inútil.
24. Lejana y difícil de hallar es la sabiduría.
25. Investigué por doquier resuelto a hallar sabiduría y la razón de las cosas, y a comprobar que la insensatez es maldad y la necedad locura.
26. Pero más amarga que la muerte es aquella mujer que es una trampa, que por corazón tiene una red y por brazos cadenas. Quien agrada a Dios se librará de ella, pero los pecadores no huyen de sus lazos.
27-28. A esta conclusión llego, dice el Predicador. Paso tras paso llegué a este resultado tras investigar en todas direcciones: de mil hombres, uno podía tenerse por sabio; y de las mujeres, ninguna.
29. Y descubrí que si bien Dios hizo íntegros a los hombres, cada cual se apartó para ir por su camino cuesta abajo.