10. El que deba ir preso, caerá preso; el que deba morir a espada, morirá a filo de espada.Aquí se verá la paciencia y la fidelidad del pueblo santo.
11. A continuación vi que otra bestia surgía de la tierra con dos cuernos semejantes a los de un cordero, pero con una voz como la del dragón.
12. Poseía la misma autoridad de la primera bestia en presencia de ésta, y exigió que el mundo entero adorara a la primera bestia, que había sido sanada.
13. Los milagros que realizaba eran increíbles; podía, por ejemplo, hacer que cayeran del cielo llamaradas de fuego ante los ojos asombrados de la humanidad.