27. Pero enseguida Jesús se dirigió a ellos diciendo:—Tranquilícense, soy yo. No tengan miedo.
28. Pedro contestó:—Señor, si eres tú, manda que yo vaya hasta ti caminando sobre el agua.
29. Jesús le dijo:—Ven.Pedro saltó de la barca y echó a andar sobre el agua para ir hacia Jesús.
30. Pero al sentir la violencia del viento, se asustó y, como vio que comenzaba a hundirse, gritó:—¡Señor, sálvame!