34. Les aconsejo, pues, que coman algo, que les vendrá bien para su salud; por lo demás, ni un cabello de la cabeza se perderá.
35. Dicho esto, Pablo tomó un pan y, después de dar gracias a Dios delante de todos, lo partió y se puso a comer.
36. Los demás se sintieron entonces más animados, y también tomaron alimento.
37. En el barco estábamos en total doscientas setenta y seis personas.
38. Una vez satisfechos, arrojaron el trigo al mar para aligerar la nave.