18. Y decís también: «Jurar por el altar no compromete a nada. Lo que compromete es jurar por la ofrenda que está sobre el altar».
19. ¡Ciegos! ¿Qué es más importante, la ofrenda o el altar por el que la ofrenda queda consagrada?
20. El que jura por el altar, jura también por todo lo que hay sobre él;
21. el que jura por el Templo, jura también por aquel que vive dentro de él.