14. Labán le dijo:—¡No cabe duda de que perteneces a mi familia!Jacob se quedó con Labán durante un mes.
15. Un día, Labán dijo a Jacob:—Tú eres pariente mío, pero no por eso has de trabajar gratis para mí. Dime qué salario quieres que te pague.
16. Labán tenía dos hijas. La mayor se llamaba Lía y la menor Raquel.
17. Lía tenía unos ojos apagados; Raquel, en cambio, era hermosa de los pies a la cabeza.
18. Como Jacob se había enamorado de ella, contestó a Labán:—Trabajaré siete años a tu servicio para casarme con Raquel, tu hija menor.
19. Labán le contestó:—Es mejor que te la entregue a ti, y no a un extraño. Quédate conmigo.