2 Reyes 10:18-29 La Palabra Versión Española (BLP)

18. Luego convocó a toda la gente y les dijo:—Si Ajab rindió culto a Baal, Jehú lo superará.

19. Así que, llamadme a todos los profetas de Baal y a todos sus fieles y sacerdotes sin excepción, porque quiero ofrecer a Baal un gran sacrificio. El que falte morirá.Jehú actuaba con astucia para exterminar a los fieles de Baal.

20. A continuación ordenó:—Anunciad una celebración solemne en honor de Baal.

21. La anunciaron. Luego envió mensajeros por todo Israel y llegaron todos los fieles de Baal, sin faltar ninguno. Entraron al templo de Baal y lo llenaron por completo.

22. Entonces Jehú ordenó al encargado del vestuario:—Saca vestiduras para todos los fieles de Baal.Él se las sacó.

23. Jehú y Jonadab, el hijo de Recab, entraron en el templo, y Jehú dijo a los fieles de Baal:—Comprobad que aquí entre vosotros solo hay fieles de Baal y que no hay fieles del Señor.

24. Luego entraron a ofrecer sacrificios y holocaustos. Jehú había dejado apostados fuera ochenta hombres con estas órdenes:—El que deje escapar a alguno de los hombres que yo os entregue, lo pagará con su vida.

25. Y cuando concluyó el holocausto, Jehú ordenó a los guardias y oficiales:—Entrad y matadlos. Que no escape ninguno.Los guardias y oficiales los pasaron a cuchillo y los arrojaron fuera. Luego fueron al camarín del templo de Baal,

26. sacaron de allí la estatua de Baal y la quemaron.

27. Finalmente derribaron las columnas y el templo de Baal y convirtieron el lugar en una cloaca hasta el día de hoy.

28. Y así fue como Jehú erradicó de Israel a Baal.

29. Sin embargo, Jehú no se apartó de los pecados que Jeroboán, el hijo de Nabat, hizo cometer a Israel: los becerros de oro de Betel y Dan.

2 Reyes 10