3. Ciertamente ninguno de los que esperan en Ti será avergonzado; Sean avergonzados los que sin causa se rebelan.
4. SEÑOR, muéstrame Tus caminos, Enséñame Tus sendas.
5. Guíame en Tu verdad y enséñame, Porque Tú eres el Dios de mi salvación; En Ti espero todo el día.
6. Acuérdate, oh SEÑOR, de Tu compasión y de Tus misericordias, Que son eternas.