45. Y Jesús preguntó: "¿Quién es el que Me ha tocado?" Mientras todos lo negaban, Pedro dijo, y los que con él estaban: "Maestro, las multitudes Te aprietan y Te oprimen."
46. Pero Jesús dijo: "Alguien Me tocó, porque me di cuenta de que había salido poder de Mí."
47. Al ver la mujer que ella no había pasado inadvertida, se acercó temblando, y cayendo delante de El, declaró en presencia de todo el pueblo la razón por la cual Lo había tocado, y cómo al instante había sido sanada.
48. Y El le dijo: "Hija, tu fe te ha sanado; vete en paz."
49. Mientras Jesús estaba todavía hablando, vino alguien de la casa de Jairo, oficial de la sinagoga, diciendo: "Tu hija ha muerto; no molestes más al Maestro."
50. Pero cuando Jesús lo oyó, le respondió: "No temas; cree solamente, y ella será sanada."