20. "Porque nosotros no podemos dejar de decir lo que hemos visto y oído."
21. Y después de amenazarlos otra vez, los dejaron ir, no hallando la manera de castigarlos por causa del pueblo, porque todos glorificaban a Dios por lo que había acontecido;
22. porque el hombre en quien se había realizado este milagro (esta señal) de sanidad tenía más de cuarenta años.
23. Cuando quedaron en libertad, fueron a los suyos y les contaron todo lo que los principales sacerdotes y los ancianos les habían dicho.
24. Al oír ellos esto, unánimes alzaron la voz a Dios y dijeron: "Oh, Señor, Tú eres el que HICISTE EL CIELO Y LA TIERRA, EL MAR Y TODO LO QUE EN ELLOS HAY,