Ezequiel 37:8-16 La Nueva Biblia de los Hispanos (NBLH)

8. Y miré que había tendones sobre ellos, creció la carne y la piel los cubrió, pero no había espíritu en ellos.

9. Entonces El me dijo: "Profetiza al espíritu, profetiza, hijo de hombre, y dile al espíritu: 'Así dice el Señor DIOS: "Ven de los cuatro vientos, oh espíritu, y sopla sobre estos muertos, y vivirán."'"

10. Y profeticé como El me había ordenado, y el espíritu entró en ellos, y vivieron y se pusieron en pie, un enorme e inmenso ejército.

11. Entonces El me dijo: "Hijo de hombre, estos huesos son toda la casa de Israel. Ellos dicen: 'Nuestros huesos se han secado, y nuestra esperanza ha perecido. Estamos completamente destruidos.'

12. "Por tanto, profetiza, y diles: 'Así dice el Señor DIOS: "Voy a abrir sus sepulcros y los haré subir de sus sepulcros, pueblo Mío, y los llevaré a la tierra de Israel.

13. "Y sabrán que Yo soy el SEÑOR, cuando abra sus sepulcros y los haga subir a ustedes de sus sepulcros, pueblo Mío.

14. "Pondré Mi Espíritu en ustedes, y vivirán, y los estableceré en su tierra. Entonces sabrán que Yo, el SEÑOR, he hablado y lo he hecho," declara el SEÑOR.'"

15. Y vino a mí la palabra del SEÑOR:

16. "Tú, hijo de hombre, toma una vara y escribe en ella: 'Para Judá y para los Israelitas, sus compañeros.' Toma luego otra vara y escribe en ella: 'Para José, la vara de Efraín, y para toda la casa de Israel, sus compañeros.'

Ezequiel 37