11. Ben Abinadab, en toda la altura de Dor (Tafat, hija de Salomón, era su mujer);
12. Baana, hijo de Ahilud, en Taanac y Meguido y todo Bet Seán, que está junto a Saretán, más abajo de Jezreel, desde Bet Seán hasta Abel Mehola, hasta el otro lado de Jocmeam;
13. Ben Geber en Ramot de Galaad (las aldeas de Jair, hijo de Manasés, que están en Galaad eran de él: la región de Argob que está en Basán, sesenta ciudades grandes con muros y cerrojos de bronce eran de él);
14. Ahinadab, hijo de Iddo, en Mahanaim;
15. Ahimaas en Neftalí (también se casó con Basemat, hija de Salomón);
16. Baana, hijo de Husai, en Aser y Bealot;
17. Josafat, hijo de Parúa, en Isacar;
18. Simei, hijo de Ela, en Benjamín;
19. Geber, hijo de Uri, en la tierra de Galaad, la región de Sehón, rey de los Amorreos, y de Og, rey de Basán; él era el único gobernador que estaba en aquella tierra.
20. Judá e Israel eran tan numerosos como la arena que está en abundancia a la orilla del mar; comían, bebían y se alegraban.
21. Salomón gobernaba todos los reinos desde el Río (Eufrates) hasta la tierra de los Filisteos y hasta la frontera de Egipto. Ellos trajeron tributo y sirvieron a Salomón todos los días de su vida.
22. La provisión de Salomón para un día era de 30 coros (6,600 litros) de flor de harina y 60 coros (13,200 litros) de harina,
23. diez bueyes cebados, veinte bueyes de pasto y cien ovejas, sin contar los ciervos, gacelas, corzos y aves cebadas.
24. Porque Salomón tenía dominio sobre todos los reinos al oeste del Río (Eufrates), desde Tifsa hasta Gaza, sobre todos los reyes al oeste del Río; y tuvo paz por todos lados a su alrededor.
25. Y Judá e Israel vivieron seguros, cada uno bajo su parra y bajo su higuera, desde Dan hasta Beerseba, todos los días de Salomón.
26. Salomón tenía 40,000 establos de caballos para sus carros y 12,000 jinetes.
27. Y los gobernadores abastecían, cada uno un mes, al rey Salomón y a todos los que venían a la mesa del rey Salomón. No dejaban que faltara nada.
28. También llevaban, cada uno según su obligación, cebada y paja para los caballos de tiro y los corceles al lugar donde debieran estar.
29. Dios dio a Salomón sabiduría, gran discernimiento y amplitud de corazón como la arena que está a la orilla del mar.