Mateo 25:4-21 La Biblia Traducción Interconfesional Versión Española (BTI)

4. En cambio, las previsoras, junto con las lámparas, llevaron también alcuzas de aceite.

5. Como el novio tardaba en llegar, les entró sueño a todas y se durmieron.

6. Cuando a eso de la medianoche se oyó gritar: “¡Ya viene el novio! ¡Salid a recibirlo!”,

7. las diez muchachas se despertaron y comenzaron a preparar sus lámparas.

8. Las descuidadas, dirigiéndose a las previsoras, les dijeron: “Nuestras lámparas se están apagando. Dadnos un poco de vuestro aceite”.

9. Las previsoras les contestaron: “No podemos, porque entonces tampoco nosotras tendríamos bastante. Mejor es que acudáis a quienes lo venden y lo compréis”.

10. Pero mientras estaban comprándolo, llegó el novio, y las que lo tenían todo a punto entraron con él a la fiesta nupcial, y luego la puerta se cerró.

11. Más tarde llegaron las otras muchachas y se pusieron a llamar: “¡Señor, señor, ábrenos!”.

12. Pero él les contestó: “Os aseguro que no sé quiénes sois”.

13. Estad, pues, muy atentos porque no sabéis ni el día ni la hora [de la venida del Hijo del hombre].

14. Igualmente [el reino de los cielos] es como un hombre que, al irse de viaje, reunió a sus criados y les confió la administración de sus negocios.

15. A cada cual, de acuerdo con su capacidad, le confió una cantidad de dinero: a uno le entregó cinco talentos; a otro, dos; y a otro, uno. Luego emprendió su viaje.

16. El que había recibido cinco talentos negoció con su capital y lo duplicó.

17. El que había recibido dos talentos hizo lo mismo, y también duplicó su capital.

18. En cambio, el que solamente había recibido un talento, tomó el dinero del amo, hizo un hoyo en el suelo y lo enterró.

19. Al cabo de mucho tiempo regresó el amo y se puso a hacer cuentas con sus criados.

20. Llegó el que había recibido los cinco talentos y, presentándole otros cinco, le dijo: “Señor, tú me entregaste cinco talentos; mira, he logrado duplicarlos”.

21. El amo le contestó: “Está muy bien. Has sido un administrador honrado y fiel. Y como has sido fiel en lo poco, yo te pondré al frente de mucho más. Entra y participa en mi propia alegría”.

Mateo 25