4. Entonces recibí otro mensaje del SEÑOR Todopoderoso:
5. «Diles lo siguiente a toda la gente de la tierra y a los sacerdotes: “Cuando ustedes ayunan y hacen lamentación en el quinto y séptimo mes del año como lo han hecho por setenta años, en realidad no lo hacen por mí.
6. ¿No es cierto que cuando comen y beben lo hacen para su propia satisfacción?
7. ¿No es esto lo mismo que el SEÑOR dijo por medio de los primeros profetas? ¿No dijo lo mismo cuando Jerusalén y los pueblos de alrededor estaban habitados y seguros y cuando aún vivía gente en el Néguev y en la Sefelá?”»