Salmos 71:3-16 La Biblia: La Palabra de Dios para Todos (PDT)

3. Sé tú mi roca donde acudo a refugiarme, pues tú diste la orden de salvarme. Tú eres mi roca, mi fortaleza.

4. Dios mío, rescátame de las garras del perverso, del delincuente y del violento.

5. Señor DIOS, tú eres mi esperanza; he confiado en ti desde mi juventud.

6. He dependido de ti desde antes de nacer. Tú me has ayudado desde que estaba en el vientre de mi madre. Siempre te estoy alabando.

7. Tú eres mi poderoso refugio, y me he convertido en un ejemplo para los demás.

8. Te honro y alabo con mi boca todo el día.

9. No me apartes de ti en mi vejez; no me abandones mientras voy perdiendo fuerzas.

10. Mis enemigos hacen planes contra mí; se han aliado los que quieren matarme.

11. Mis enemigos dicen: «Él no tiene quién lo salve. Dios lo ha abandonado, ¡atrapémoslo!»

12. Dios mío, no me abandones; apresúrate y ven a salvarme.

13. Que mis enemigos sean avergonzados y destruidos; que los que quieren hacerme daño se cubran de vergüenza y humillación.

14. Pero yo siempre confiaré en ti; te alabaré cada día más.

15. Todo el día hablaré de tu justicia y salvación; aunque es algo que no alcanzo a comprender.

16. Señor DIOS, cantaré acerca de tus poderosas obras; haré que se recuerde tu justicia, solamente la tuya.

Salmos 71