17. Los hombres le dijeron: —Cumpliremos la promesa que te hicimos,
18. pero cuando volvamos a este lugar, tienes que atar esta cuerda roja a la ventana. Tendrás que reunir a toda tu familia en tu casa: tus padres, tus hermanos y todos los demás.
19. Todo el que salga de tu casa a la calle será responsable de su propia muerte, no será culpa nuestra; pero si matan a alguno de los que estén contigo dentro tu casa, nosotros responderemos por su muerte.
20. Eso sí, si tú nos denuncias, ya no estaremos obligados a cumplir nuestro juramento.