5. Morirás en paz y así como se quemó perfume en honor de tus antepasados, los reyes anteriores a ti, también se quemará perfume en tu honor. La gente se lamentará por ti diciendo: ¡Qué dolor, Señor!’ Porque así lo he decidido”, dice el SEÑOR».
6. Entonces el profeta Jeremías le dijo todo esto a Sedequías, rey de Judá, en Jerusalén.
7. El ejército del rey de Babilonia estaba atacando Jerusalén, Laquis y Azeca, que eran las únicas ciudades fortificadas que aún quedaban en Judá.
8. El SEÑOR le dio mensaje a Jeremías después de que el rey Sedequías hiciera un pacto con todo el pueblo de Jerusalén para dar libertad a los esclavos.
9. El pacto consistía en que los que tuvieran esclavos o esclavas hebreos los dejaran en libertad para que ningún judío tuviera como esclavo a otro judío.
10. Todos los jefes y todo el pueblo que se había comprometido a cumplir el pacto, obedecieron y dejaron en libertad a sus esclavos.
11. Pero después se arrepintieron de haberlos liberado, los obligaron a regresar y los esclavizaron nuevamente.
12. Entonces el SEÑOR le dio este mensaje a Jeremías, mensaje del SEÑOR:
13. «Esto dice el SEÑOR Dios de Israel: “Yo hice un pacto con tus antepasados cuando los saqué de Egipto, donde eran esclavos. Les ordené
14. que cada siete años dieran libertad a todo esclavo hebreo que se hubiera vendido a ellos y que les hubiera servido durante seis años. Pero sus antepasados no prestaron atención ni me obedecieron.