20. ¿Acaso no es Efraín mi hijo querido? ¿No es mi hijo preferido? Aunque lo he reprendido mucho, de verdad que siempre está en mi corazón. Lo amo profundamente y siento una gran compasión por él, dice el SEÑOR.
21. »Haz para ti indicadores en el camino, coloca señales. Presta atención a la vía principal, al camino que has recorrido. Regresa, virgen Israel, regresa a tus ciudades.
22. ¿Cuánto tiempo más seguirás alejándote de mí? El SEÑOR creará algo nuevo en la tierra: la mujer marchará alrededor del hombre».
23. Este es el mensaje del SEÑOR Todopoderoso, Dios de Israel: «Cuando yo haga cambiar la suerte del pueblo de Judá, cuando traiga de nuevo a los prisioneros y ellos estén de nuevo en su tierra y en sus ciudades, la gente volverá a decir: “Que el SEÑOR te bendiga, hogar de justicia, monte santo”.
24. El pueblo de Judá y de todas sus ciudades vivirá allí en armonía. Los campesinos y los pastores con sus rebaños vivirán también allí.
25. Refrescaré a los sedientos y fortaleceré a los que estén desfallecidos».
26. En ese momento desperté y abrí los ojos. Había tenido un buen sueño.