1. Ojalá fueras como mi hermanito, un bebé de mi mamá. Si te encontrara en la calle, te besaría y nadie me señalaría por eso.
2. Te llevaría a casa de mi mamá, al cuarto de la que me dio a luz; y allí te daría a beber vino fragante, mi dulce jugo de granada.
3. Él coloca uno de sus brazos bajo mi cabeza y con el otro me abraza.
4. Mujeres de Jerusalén, júrenme por lo que más quieran, que no molestarán al amor, que no lo despertarán hasta que sea el momento indicado.
5. ¿Quién es esa mujer que sube del desierto apoyada en su amado? Debajo del manzano te desperté, allí donde tu madre te concibió, allí donde te dio a luz.
6. Llévame grabada en tu corazón como un tatuaje; llévame como un tatuaje grabada en tu piel. El amor es más fuerte que la muerte y la pasión más fuerte que el sepulcro. Sus destellos son de fuego, como una llama divina.
7. Nada puede acabar con el amor, nada puede destruirlo. Si un hombre ofreciera toda su fortuna para comprar el amor, la gente lo despreciaría.