34. se expresó en estos términos ante sus colegas y la guarnición de Samaría:— ¿Qué están haciendo esos judíos muertos de hambre? ¿Es que nadie se lo va a impedir? ¿Volverán a ofrecer sacrificios? ¿Serán capaces de terminar la obra? Las piedras calcinadas ¿recobrarán vida de entre los montones de escombros?
35. Tobías, el amonita, que estaba junto a él, comentó:— Bastará que una zorra suba a la muralla que están construyendo para que se desmorone.
36. [Entonces oré al Señor]:— ¡Escucha, Dios nuestro, cómo se burlan de nosotros! ¡Que sus insultos se vuelvan contra ellos y que se conviertan en despojos humanos en un país que los esclavice!