Jeremías 1:50-54 La Biblia Hispanoamericana Traducción Interconfesional (BHTI)

50. Pero, puesto que no consisten sino en pedazos de madera recubiertos de oro y plata, antes o después se verá que son un puro engaño. Todas las naciones y sus reyes descubrirán un día que no se trata de dioses, sino de objetos hechos por manos humanas y que en ellos no hay nada que sea obra de Dios.

51. ¿Quién no se va a dar cuenta de que no son dioses?

52. ¡No pueden nombrar a nadie rey de un país, ni pueden tampoco enviar lluvia a los humanos!

53. Carecen de poder, y por tanto son incapaces de mantener juicios propios o de liberar al que sufre injustamente. ¡Son como las cornejas que vuelan entre el cielo y la tierra!

54. Si un día se incendia el templo de esos dioses de madera, recubiertos de oro y plata, sus sacerdotes saldrán corriendo para ponerse a salvo, pero ellos arderán como troncos en medio de las llamas.

Jeremías 1