12. Tal vez el Señor tenga en cuenta mi aflicción y recompense con bendiciones estas maldiciones de hoy.
13. David y sus hombres siguieron su camino, mientras que Simeí los seguía por la ladera del monte, maldiciendo, tirando piedras y levantando polvo.
14. David y toda la gente que lo acompañaba llegaron agotados al Jordán y descansaron allí.