1. »Sucede con el reino de los cielos como con el dueño de una finca, que salió muy de mañana a contratar trabajadores para su viñedo.
2. Se arregló con ellos para pagarles el salario de un día, y los mandó a trabajar a su viñedo.
3. Volvió a salir como a las nueve de la mañana, y vio a otros que estaban en la plaza desocupados.