San Lucas 22:36-46 Dios Habla Hoy (DHH)

36. Entonces les dijo:—Ahora, en cambio, el que tenga dinero, que lo traiga, y también provisiones; y el que no tenga espada, que venda su abrigo y se compre una.

37. Porque les digo que tiene que cumplirse en mí esto que dicen las Escrituras: “Y fue contado entre los malvados.” Pues todo lo que está escrito de mí, tiene que cumplirse.

38. Ellos dijeron:—Señor, aquí hay dos espadas.Y él contestó:—Basta ya de hablar.

39. Luego Jesús salió y, según su costumbre, se fue al Monte de los Olivos; y los discípulos lo siguieron.

40. Al llegar al lugar, les dijo:—Oren, para que no caigan en tentación.

41. Se alejó de ellos como a la distancia de un tiro de piedra, y se puso de rodillas para orar.

42. Dijo: «Padre, si quieres, líbrame de este trago amargo; pero que no se haga mi voluntad, sino la tuya.»[

43. En esto se le apareció un ángel del cielo, para darle fuerzas.

44. En medio de su gran sufrimiento, Jesús oraba aún más intensamente, y el sudor le caía a tierra como grandes gotas de sangre.]

45. Cuando se levantó de la oración, fue a donde estaban los discípulos, y los encontró dormidos, vencidos por la tristeza.

46. Les dijo:—¿Por qué están durmiendo? Levántense y oren, para que no caigan en tentación.

San Lucas 22