Hechos 8:20-34 Dios Habla Hoy (DHH)

20. Entonces Pedro le contestó:—¡Que tu dinero se condene contigo, porque has pensado comprar con dinero lo que es un don de Dios!

21. Tú no tienes ningún derecho a recibirlo, porque delante de Dios tu corazón no es recto.

22. Abandona esta maldad tuya, y ruega a Dios, para ver si te perdona el haber pensado así.

23. Porque veo que estás lleno de amargura y que la maldad te tiene preso.

24. Simón contestó:—Oren ustedes al Señor por mí, para que no me pase nada de esto que me han dicho.

25. Después de dar testimonio y de comunicar la palabra del Señor, los apóstoles anunciaron la buena noticia en muchas de las aldeas de Samaria, y regresaron a Jerusalén.

26. Después de esto, un ángel del Señor le dijo a Felipe: «Levántate y vete al sur, por el camino de Jerusalén a Gaza.» Este camino pasa por el desierto.

27. Felipe se levantó y se fue; y en el camino se encontró con un hombre de Etiopía. Era un alto funcionario, tesorero de la reina de Etiopía, el cual había ido a Jerusalén a adorar a Dios.

28. Iba de regreso a su país, sentado en su carro y leyendo el libro del profeta Isaías.

29. El Espíritu le dijo a Felipe: «Ve y acércate a ese carro.»

30. Cuando Felipe se acercó, oyó que el etiope leía el libro de Isaías; entonces le preguntó:—¿Entiende usted lo que está leyendo?

31. El etiope le contestó:—¿Cómo lo voy a entender, si no hay quien me lo explique?Y le pidió a Felipe que subiera y se sentara junto a él.

32. La parte de la Escritura que estaba leyendo era ésta:«Fue llevado como una oveja al matadero;como un cordero que se queda calladodelante de los que lo trasquilan,así tampoco abrió él la boca.

33. Fue humillado, y no se le hizo justicia;¿quién podrá hablar de su descendencia?Porque su vida fue arrancada de la tierra.»

34. El funcionario etiope le preguntó a Felipe:—Dime, por favor, ¿de quién dice esto el profeta: de sí mismo o de algún otro?

Hechos 8