20. Les aseguro delante de Dios que lo que les estoy escribiendo es la verdad.
21. Después me dirigí a las regiones de Siria y Cilicia.
22. En cambio, los hermanos de las iglesias de Cristo que están en Judea no me conocían personalmente.
23. Solamente oían decir: «El que antes nos perseguía, anda ahora predicando el evangelio que en otro tiempo quería destruir.»
24. Y alababan a Dios por causa mía.