13. y vean que sus vacas y ovejas han aumentado, lo mismo que su oro y su plata y todas sus propiedades,
14. no se llenen de orgullo ni se olviden del Señor su Dios, que los sacó de Egipto, donde eran esclavos;
15. que los hizo marchar por el grande y terrible desierto, lleno de serpientes venenosas y escorpiones, y donde no había agua. Pero él sacó agua de una dura roca y les dio de beber,
16. y en el desierto los alimentó con maná, comida que los antepasados de ustedes no habían conocido, para humillarlos y ponerlos a prueba, y para bien de ustedes al fin de cuentas.