10. »Si hacen un préstamo a su prójimo, no entren en su casa para tomar ninguna prenda suya.
11. Quédense afuera, y esperen a que él saque lo que va a dar en prenda.
12. Y si se trata de una persona pobre, no deben retener la prenda durante la noche;
13. tienen que devolvérsela a la puesta del sol, para que así pueda taparse con su manto cuando se vaya a dormir. Así él los bendecirá y ustedes harán una buena acción delante del Señor su Dios.