4. Los hijos que le nacieron en Jerusalén se llamaban: Samúa, Sobab, Natán, Salomón,
5. Ibhar, Elisúa, Elpélet,
6. Nógah, Néfeg, Jafía,
7. Elisamá, Eliadá y Elifélet.
8. Cuando los filisteos supieron que David había sido consagrado como rey de todo Israel, se lanzaron todos en busca suya; pero David lo supo y les salió al encuentro.
9. Entonces los filisteos avanzaron e hicieron incursiones por el valle de Refaim.
10. Por esto, David consultó al Señor, y le preguntó:—¿Puedo atacar a los filisteos? ¿Me darás la victoria sobre ellos?Y el Señor le respondió:—Atácalos, pues te daré la victoria sobre ellos.
11. David subió a Baal-perasim, y allí los venció. Por eso dijo: «Como un torrente de agua, Dios me ha abierto paso entre mis enemigos.» Y llamaron a aquel lugar Baal-perasim.
12. Además, los filisteos dejaron abandonados a sus dioses, y David los mandó quemar.
13. Pero los filisteos volvieron a hacer incursiones por el valle de Refaim,
14. así que David consultó de nuevo a Dios, y Dios le contestó:—No los ataques de frente, sino rodéalos y atácalos por la retaguardia cuando llegues a los árboles de bálsamo.
15. Cuando escuches ruido de pasos por encima de las copas de los árboles, lánzate a la batalla, porque eso significa que yo voy delante de ti para herir de muerte al ejército filisteo.
16. David hizo lo que Dios le había ordenado, y derrotaron al ejército de los filisteos desde Gabaón hasta Guézer,