7. Dios da a cada uno alguna prueba de la presencia del Espíritu, para provecho de todos.
8. Por medio del Espíritu, a unos les concede que hablen con sabiduría; y a otros, por el mismo Espíritu, les concede que hablen con profundo conocimiento.
9. Unos reciben fe por medio del mismo Espíritu, y otros reciben el don de curar enfermos.
10. Unos reciben poder para hacer milagros, y otros tienen el don de profecía. A unos, Dios les da la capacidad de distinguir entre los espíritus falsos y el Espíritu verdadero, y a otros la capacidad de hablar en lenguas; y todavía a otros les da la capacidad de interpretar lo que se ha dicho en esas lenguas.
11. Pero todas estas cosas las hace con su poder el único y mismo Espíritu, dando a cada persona lo que a él mejor le parece.
12. El cuerpo humano, aunque está formado por muchos miembros, es un solo cuerpo. Así también Cristo.
13. Y de la misma manera, todos nosotros, judíos o no judíos, esclavos o libres, fuimos bautizados para formar un solo cuerpo por medio de un solo Espíritu; y a todos se nos dio a beber de ese mismo Espíritu.
14. Un cuerpo no se compone de un solo miembro, sino de muchos.
15. Si el pie dijera: «Como no soy mano, no soy del cuerpo», no por eso dejaría de ser del cuerpo.
16. Y si la oreja dijera: «Como no soy ojo, no soy del cuerpo», no por eso dejaría de ser del cuerpo.