8. Y en un solo mes despedí a tres pastores que habían agotado mi paciencia y que me odiaban.
9. A las ovejas les dije: “¡No volveré a ser vuestro pastor! ¡Si alguna ha de morir, que muera! ¡Si a alguna la matan, que la maten! ¡Y las que queden, que se coman unas a otras!”
10. Tomé entonces mi bastón llamado “Bienestar” y lo rompí en señal de que quedaba anulado el pacto que Dios había hecho con todas las naciones.