8. y todos juntos hicieron un plan para atacar Jerusalén y causar destrozos en ella.
9. Entonces oramos a nuestro Dios, y pusimos guardia día y noche para defendernos de ellos.
10. Y la gente de Judá decía: “La fuerza del cargador desmaya ante tal cantidad de escombros, y nosotros somos incapaces de reconstruir esta muralla.”