10. pero no podían hacerle frente, porque hablaba con la sabiduría que le daba el Espíritu Santo.
11. Pagaron entonces a unos hombres para que afirmasen que le habían oído decir palabras ofensivas contra Moisés y contra Dios.
12. De este modo alborotaron al pueblo, a los ancianos y a los maestros de la ley; y atacaron a Esteban, lo apresaron y lo llevaron ante la Junta Suprema.
13. Además presentaron testigos falsos, que dijeron:–Este hombre no deja de lanzar insultos contra este santo templo y contra la ley.
14. Le hemos oído decir que ese Jesús de Nazaret va a destruir el templo y va a cambiar las costumbres que nos dejó Moisés.
15. Todos los miembros de la Junta Suprema fijaron la vista en Esteban y vieron que su rostro era como el de un ángel.