26. El Señor se dirigió a mí y me dijo:
27. “Los israelitas andan diciendo que tus visiones proféticas son de cumplimiento a largo plazo.
28. Por lo tanto, diles: ‘Esto dice el Señor: Mis palabras no tardarán en cumplirse; lo que he dicho, se cumplirá. Yo, el Señor, doy mi palabra.’ ”