4. y si llegáis a saberlo, investigad bien el asunto; y si resulta cierto que un acto tan repugnante se ha cometido en Israel,
5. llevaréis ante el tribunal de la ciudad a quien haya cometido esa mala acción y lo condenaréis a morir apedreado.
6. “La sentencia de muerte se dictará solo bajo la declaración de dos o tres testigos, pues por la declaración de un solo testigo nadie podrá ser condenado a muerte.
7. Los testigos serán los primeros en arrojar piedras al condenado, y después lo hará todo el pueblo. Así acabaréis con el mal que haya en medio de vosotros.