5. Niños y niñas llenarán las plazas de la ciudad y jugarán en ellas.
6. En aquel tiempo, todo esto parecerá imposible a los ojos de los que queden de mi pueblo; pero a mí no me lo parecerá. Yo, el Señor todopoderoso, lo afirmo:
7. Yo libertaré a mi pueblo del poder del país de oriente y del país de occidente,
8. y lo traeré a Jerusalén para que viva allí. Ellos serán entonces mi pueblo y yo seré su Dios, con fidelidad y justicia.”
9. Esto dice el Señor todopoderoso: “Esforzaos, vosotros que en estos días habéis oído las palabras dichas por los profetas, desde el día en que se pusieron los cimientos para la reconstrucción del templo del Señor todopoderoso.