14. y su boca está llena de maldición y amargura.
15. Sus pies corren ligeros a derramar sangre:
16. destrucción y miseria hay en sus caminos
17. y no conocen el camino de la paz.
18. ¡Jamás tienen presente que hay que temer a Dios!”
19. Sabemos que lo que dice el libro de la ley, lo dice a quienes están sometidos a ella, para que todos callen y el mundo entero caiga bajo el juicio de Dios;
20. porque Dios no declarará justo a nadie por haber cumplido la ley, ya que la ley sirve tan solo para hacernos saber que somos pecadores.