Mateo 26:41-53 Dios Habla Hoy con Deuterocanónicos Versión Española (DHHED)

41. Permaneced despiertos y orad para no caer en tentación. Tenéis buena voluntad, pero vuestro cuerpo es débil.

42. Por segunda vez se fue, y oró así:–Padre mío, si no es posible evitar que yo sufra esta prueba, hágase tu voluntad.

43. Cuando volvió, encontró de nuevo dormidos a los discípulos, porque los ojos se les cerraban de sueño.

44. Los dejó y se fue a orar por tercera vez, repitiendo las mismas palabras.

45. Entonces regresó a donde estaban los discípulos y les dijo:–¿Aún seguís durmiendo y descansando? Ha llegado la hora en que el Hijo del hombre va a ser entregado en manos de los pecadores.

46. ¡Levantaos, vámonos: ya se acerca el que me traiciona!

47. Todavía estaba hablando Jesús, cuando Judas, uno de los doce discípulos, llegó acompañado de mucha gente armada con espadas y palos. Iban enviados por los jefes de los sacerdotes y los ancianos de los judíos.

48. Judas, el traidor, les había dado una contraseña, diciéndoles:–Aquel a quien yo bese, ese es. ¡Apresadlo!

49. Así que, acercándose a Jesús, dijo:–¡Buenas noches, Maestro!Y le besó.

50. Jesús le contestó:–Amigo, lo que has venido a hacer, hazlo.Entonces los otros se acercaron, echaron mano a Jesús y lo apresaron.

51. En esto, uno de los que estaban con Jesús sacó una espada y cortó una oreja al criado del sumo sacerdote.

52. Jesús le dijo:–Guarda tu espada en su sitio, porque todo los que empuñan espada, a espada morirán.

53. ¿No sabes que yo podría rogar a mi Padre, y que él me mandaría ahora mismo más de doce ejércitos de ángeles?

Mateo 26