55. Los jefes de los sacerdotes y toda la Junta Suprema andaban buscando alguna prueba para condenar a muerte a Jesús, pero no la encontraban.
56. Porque, aunque muchos presentaban falsos testimonios contra él, se contradecían unos a otros.
57. Algunos se levantaron y le acusaron falsamente diciendo:
58. –Nosotros le hemos oído decir: ‘Yo voy a destruir este templo construido por los hombres, y en tres días levantaré otro no construido por los hombres.’
59. Pero ni aun así estaban de acuerdo en lo que decían.