Isaías 30:21-33 Dios Habla Hoy con Deuterocanónicos Versión Española (DHHED)

21. Y si te desvías a la derecha o a la izquierda, oirás una voz detrás de ti, que te dirá: “Por aquí es el camino, id por aquí.”

22. Y despreciarás como cosas impuras tus imágenes de plata y tus ídolos recubiertos de oro. Los rechazarás como algo impuro y los considerarás basura.

23. El Señor te dará lluvia para la semilla que siembres en la tierra, y la tierra producirá trigo abundante y fértil. Aquel día tu ganado tendrá lugar en abundancia para pastar.

24. Hasta los bueyes y los burros que trabajan en tus campos tendrán para comer el mejor y más exquisito forraje.

25. Cuando llegue el día de la gran matanza y caigan las fortalezas, habrá ríos y torrentes de agua en todas las altas montañas y en las colinas elevadas.

26. El Señor curará y vendará las heridas de su pueblo. Entonces la luna alumbrará como el sol, y la luz del sol será siete veces más brillante, como la luz de siete soles juntos.

27. Mirad, el Señor en persona viene de lejos;su furor está ardiendo con espesa humareda,sus labios están llenos de ira,su lengua es como fuego destructor,

28. su aliento, como un río desbordadoque llega hasta el cuello.Él viene a poner un yugo a las nacionespara llevarlas a la ruina,a poner un freno en la boca de los pueblospara hacerlos extraviar.

29. Para vosotros, en cambio, habrá cantos,como en noche de fiesta sagrada;vuestro corazón estará alegre,como el de quien camina al son de la flautapara ir al monte del Señor,al refugio de Israel.

30. El Señor dejará oir su voz majestuosay mostrará su poder, que actuará con ira terrible,con las llamas de un fuego devorador,con rayos, aguacero y granizo.

31. Al oir la voz del Señor y recibir su castigo,Asiria se llenará de terror,

32. y a cada golpe que descargue el Señor sobre ella,sonarán tambores y arpas.El Señor le hará una guerra terrible.

33. Desde hace mucho tiempoestá preparado para Asiria y para su reyel lugar del tormento, ancho y profundo,una hoguera encendida con leña abundante.La encenderá el soplo del Señorcomo un torrente de azufre.

Isaías 30