12. Me volví para ver de quién era la voz que me hablaba; y al hacerlo vi siete candelabros de oro,
13. y en medio de los candelabros vi a uno semejante a un hijo de hombre, vestido con una túnica que le llegaba hasta los pies y con un cinturón de oro a la altura del pecho.
14. Sus cabellos eran blancos como la lana, o como la nieve, y sus ojos parecían llamas de fuego.
15. Sus pies brillaban como bronce bruñido, fundido en un horno, y su voz era tan fuerte como el ruido de una cascada.