5. Pero tú conserva siempre el buen juicio, soporta los sufrimientos, dedícate a anunciar el evangelio, cumple bien con tu trabajo.
6. Yo ya estoy para ser ofrecido en sacrificio: ya se acerca la hora de mi muerte.
7. He peleado la buena batalla, he llegado al término de la carrera, me he mantenido fiel.
8. Ahora me espera la corona merecida que el Señor, el Juez justo, me dará en aquel día. Y no me la dará solamente a mí, sino también a todos los que con amor esperan su regreso.
9. Haz lo posible por venir pronto a verme,
10. pues Demas, que amaba más las cosas de este mundo, me ha abandonado y se ha ido a Tesalónica. Crescente se ha ido a la región de Galacia, y Tito a la de Dalmacia.