15. Yo cosí cilicio sobre mi piel, y cargué mi cabeza de polvo.
16. Mi rostro está enlodado con lloro, y mis párpados entenebrecidos;
17. a pesar de no haber injusticia en mis manos, y de haber sido limpia mi oración.
18. ¡Oh tierra! No cubras mi sangre, y no haya lugar donde se esconda mi clamor.